ESCRIBIR UN DIARIO NOS AYUDA A OLVIDAR LA ILUSIÓN DE TENER UNA VIDA PRIVADA
(ricardo piglia)

HAGO MI FICCIÓN PARA QUE SEA CIERTA
(pentti saarikoski)

domingo, 30 de enero de 2011

BANGKOK #1: Poemas desde Khao San Road.

Hace dos días que llegue a Bangkok. En poco tiempo he conocido buena gente y me he reencontrado con otros. Todos vienen en busca del negocio, yo no. Yo estoy de paso. Siempre de paso. Tanto aquí, como en la India, como en Madrid.

No quiero decir nada sobre Bangkok, pues no he visto nada. Esta entrada es sobre Khao San Road, el barrio de los mochileros de la capital de Tailandia. Y que decir sobre este barrio, pues nada. Una mierda que voy a intentar explicar en dos poemas y que cada cual entienda lo que quiera. Se admiten, y agradecen, los comentarios.

Poema I:

Y del cielo descendí…
un cielo que se abrió
y dejando un brillante y abrasador sol,
lucidamente vi
como la miseria humana
se había transformado
en la peor de todas las mediocridades.

Mi corazón
arrojado en la acera
de la peor calle
que nunca llegue a imaginar
sonaba
con escapar
de ese mundo creado,
de ese mundo plastificado,
de ese mundo basurero,
entorno a la mediocridad blanca
y su capital.


Poema II:

Calcados,
unos de otros,
unos en otros,
caminamos
nuestra copiada individualidad
como fantasmas errantes.

Sin alma,
sin propósito,
vacíos,
vaciados por nuestro exterior
intentamos
cargar con nuestra nada
rellenándonos
de nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario